Sucedió un hermoso AVRIL del Once de Mayo

Lo vi venir, las nubes y el universo contaban tus historias, viniste del horizante, impregnada del olor de las estrellas; bajaste y las flores de la tierra se tornaron generosas, obsequiando sus aromas, para que enloquecidas con la suavidad de tu textura se enredaran a tus pies, a tus manos, a tu ser. tu escencia femenina va evocando los murmullos de la naturaleza. Armonia que reesplandece a traves de tus ojos transparentes, esa misma transparencia, que por medio de tu mirada se fijó en los seres que hoy te resguardan para alimentar tu figura amorosa hecha humana. ¿COMO DUDAR DEL MOTIVO DE TU LLEGADA? si tu luz ilumina la cotiadianidad de los dias comunes; sin musitar una palabra brinbas dones de armonia para aquietar las tormentas de los dias sin fin.

CIUDAD PERDICIÓN Canciones que escapan del pútrido aliento de alcohol y cigarrillo prestado, Malditas primaveras que parecen cerrar la noche pero en realidad dan paso a una eterna madrugada de besos, risas llanto y sangre. Noches lentas que disparan serenatas, descubren amores y entierran otros abandonados a la venganza y a la melancolía. Algunos sobreviven pero otros vacilan en calles, potreros o parques envenenados con la oscuridad. Edificios cómplices de ciudad cagadero. Despunta la filosa mañana y destapa los bolsillos vacíos, las pieles maltratadas y las almas rotas, componiéndose a medias hasta que llegue el próximo aquelarre, Enceguecidos por las infecciosas mieles que ofrece ciudad cagadero a cambio de quince minutos de protagonismo, para saber que si sobreviven, Siempre estarán al filo de caer en una eterna madrugada de ruletas rusas. MARIA ISABEL CARABALLO

Incomprensible

Incomprensible Se nubla el pensamiento, cuando, mirando a la nada, a un punto extraviado en el fondo de la soledad, rodeada de instrumentos, de mentes, de palabras imposibles, Invencible para los recuerdos que aun no acaban, sumida, Tratando de comprender lo incomprensible. …y es así, Durante la existencia se va preparando para la oscura muerte O tal vez el futuro de colores, Pero es incierto, esa sensación cava un hoyo profundo en el corazón… es así: el ángel llega, se anuncia y se va. Llego, y provocó una inundación en donde no rescate nada que mi voluntad hubiese permitido; Ahogada en tus besos y palabras, Nade por aguas mansas y vague por inmensas turbulencias dispuesta a perder la lucha por salir de nuevo a la orilla. Hoy desperté…y vi que se había ido, no quise pararme, no quise Salir para no perder la sensación reseca de su saliva en mi cuerpo, Pero sonrío, porque pedir que se quede, seria negar sus enseñanzas, lo que vino a despertar, lo que sin el no hubiera conocido, y no lo cambiaría, y no lo sacrificaría Solo por querer tenerlo a mi lado. Hoy irremediablemente, mientras deambula con la belleza boreal por el espacio, desde ya, y desde antes quiera o no Ya esta dentro de mi.

ISABEL CARABALLO

  

MIRAME Y NO ME VEAS

Mírame y no me veas! Solo mírame……. Mira lo que pasa conmigo cuando te acercas… Acércate, no te asustes, no me asustes, Mírame y no me veas, no mires mis ojos, No descubras lo que guardo dentro, Sombras derretidas que reposan tras el liquido. Cuando el tiempo era lejano no entendía hasta donde los seres como tu podían lanzarme… Ahora lo veo claro, nítido, me perturba esta tranquilidad, no es mía, no pertenece a mis días, Es ajena. Ven, reposa en la calma que se ofrece traicionera, melancólica…..no dejes que se quede así, Ven mírame, solo mírame en las sombras que resplandecen cuando llegas, cuando observas a través de tu piel, de tus manos, de tu pelo. Ven solo deja que tus poros hablen. Ven solo mírame y no me veas

MOMENTOS ETEREOS

Las palabras precisas apaciguan el viento, quebrantan la llama, los momentos etéreos anhelan congelarse, lo sabes y sin embargo escondes la mirada. Son lapsos fugaces, engendran instantes de tiempo que desfallecen al instante de su nacimiento, luego reencarnan y vuelven a morir, lo hacen de nuevo, tan solo la brevedad se profundiza en las germinaciones instantáneas..........y es esta dicha la que contamina el espíritu, esa dicha que no es mas que un suspiro de esperanza, una estupida conformidad que se arrastra hasta mendigar espacios y menguar ausencias insignificantes de tiempo, tiempo sagrado, tiempo eterno. MARIA ISABEL CARABALLO